La semana pasada comenté en una entrada que durante uno de los capítulos de la serie Roma eché en falta la famosa frase de Julio Cesar: "Alea iacta est". Puede que ésta sea la sentencia más famosa del romano o puede que no, ya que Cesar nos dejó muchas más frases para la Historia y sería complicado determinar cuál de todas ellas goza de mayor popularidad o importancia. En cualquier caso, y volviendo de nuevo a la serie, el otro día llegué al capítulo que escenifica el asesinato de Cesar y de nuevo volví a echar de menos una de esas conocidas citas y sin duda la última.
El 15 de marzo del 44 a.C. una serie de senadores se había conjurado para acabar con la vida de Cesar ya que no estaban de acuerdo con el acaparamiento de poder que éste había conseguido, o al menos ese era su pretexto. Entre ellos estaba el que era buen amigo del general romano y al que dicen que éste consideraba casi como un hijo: Marco Junio Bruto. El plan consistía en aprovechar la confusión de las reuniones del senado y apuñalar al dictador hasta acabar con su vida. El objetivo se cumplió con éxito y Cesar recibió 23 puñaladas, la última de las cuales fue asestada por Bruto. Fue en ese momento, al ver a su amigo, cuando Cesar, ya moribundo le dijo: "Tu también, Bruto, hijo mio".
En cuanto al capítulo de la serie, aunque falte (seguramente de forma deliberada) ese pequeño detalle, la escena está tan bien conseguida que, a pesar de conocer previamente la historia y el desenlace, me dejó impactado para un par de días y me sorprendió su dureza y crueldad. Es más, casi recomendaría ver la serie sólo por ese momento.
¿Y qué más podemos decir sobre la famosa cita de Cesar? Pues cabe decir que, como muchas otras frases que nos ha dejado la Historia, de ésta también existen ciertas dudas de que fuera pronunciada realmente. Incluso algunos historiadores dudan de que Cesar se refiriese con ella a su amigo Bruto y afirman que debía ser a otro senador con el mismo nombre. Traición, amistad, magnicidio e incertidumbre detrás de una sola frase. Hasta en eso fue grande Julio Cesar.
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