El primero de ellos es la invención del telescopio por parte de Galileo Galilei. A pesar de que se cree que el italiano no fue el primero en construir dicho invento (existen documentos que prueban que en Cataluña la familia Roget ya había creado uno con anterioridad), si que se considera que Galileo fue el primero en utilizarlo de forma habitual en sus estudios y en aplicar sus resultados a teorías científicas.
Desde su invención, el telescopio fue siendo mejorado paulatinamente gracias a las aportaciones de importantes científicos (entre los que destacan Kepler, Newton o Hubble) hasta llegar a nuestros días en que la ciencia dispone de potentísimos aparatos para sus investigaciones. Uno de los más grandes es el Gran Telescopio Canarias, cuyo desarrollo se completará a lo largo de este año.
Gracias a estas mejoras, durante la década de 1920, el estadounidense Hubble fue capaz de medir el desplazamiento de las galaxias, demostrando así la expansión del universo y sentando las bases para la futura teoría del Big Bang.
En cuanto a Galileo, se dice que intentó “vender” sus teorías y descubrimientos a Felipe III, pero nunca se quiso presentar a defenderlas, bien porque la recompensa no le parecía suficiente o bien porque desconfiaba y temía que le robaran sus ideas. Pero cuando en 1633 por fin decidió presentarlas, su “cita” con la Inquisición fue la que se lo impidió.
El segundo aniversario tiene como protagonista a Johannes Kepler. Y es que este científico alemán publicó en 1609 su obra “Astronomia Nova” en la que describe las dos primeras de las conocidas leyes de Kepler. En ellas se explican los movimientos de los planetas alrededor del Sol. Por un lado determinan que los planetas describen una órbita elíptica quedando el Sol en uno de sus extremos y por otro que el radio-vector que une el planeta y el Sol cubre siempre áreas iguales para un mismo periodo de tiempo. Como en todo lo relativo a los progresos científicos, lo que ahora damos por hecho y nos parece poco menos que obvio y natural, en su momento fue una gran revolución.
Por cierto, ya que hablamos de astronomía, cabe destacar que este año 2009 ha sido declarado Año Internacional de la Astronomía con el objetivo de su fomento y acercamiento al público. No cabe duda de que es muy importante conocer la ciudad, el país y el planeta en el que vivimos, pero también deberíamos dedicar algo de atención a nuestra galaxia y nuestro universo, los cuales, por desgracia, solemos tener bastante olvidados.
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