El Caballero Oscuro

Como prometí en una de las primeras entradas del blog, después de hablar de los vampiros tocaría hablar de los murciélagos. Y ahora ha llegado el momento. Más allá de lo que todos sabemos desde el punto de vista del propio animal, existe toda una leyenda negra entorno a los murciélagos: que atacan a la gente y le chupan la sangre, que se convierten en otros animales, etc. Gran parte de la culpa de que esto sea así la tienen la literatura y el cine que históricamente han asociado el murciélago a los malvados vampiros. Pero dejando a Drácula y sus secuaces de lado, una de las más famosas asociaciones que se han establecido con los murciélagos viene del mundo de los comics y es la de Batman.

Como ya habréis adivinado por los cambios que he ido haciendo en la sección “Qué estoy leyendo” y por las anteriores entradas del blog, la semana pasada terminé la lectura del que es uno de los mejores comics que he leído hasta el momento. La crítica lo cataloga como la mejor historia sobre Batman jamás escrita y es muy posible que así sea. Estoy hablando de “El Regreso del Caballero Oscuro” de Frank Miller.

El comic data de 1986 y sitúa la acción en el regreso de Batman a su lucha contra el crimen en las calles de Gotham después de una retirada forzosa por motivos personales. El hecho de haber estado tanto tiempo retirado hace que Batman se comporte más que nunca como un guardian resentido, como un vengador sin sentimientos, sin piedad. Es esta faceta la que hace de Batman un superhéroe diferente y es también la que a mi más me gusta. Y en este comic, para mi satisfacción, está plenamente desarrollada.

Al igual que en la última película “El Caballero Oscuro”, Batman aparece como un héroe políticamente incorrecto que no atiende a sentimentalismos a la hora de combatir a sus enemigos, que mantiene un enorme resentimiento por el asesinato de sus padres, que no perdona. No le importa que la gente o la sociedad no le hayan pedido que intervenga, que no le hayan pedido que les defienda. Pero lo hace porque él cree que es lo que hay que hacer.

La verdad es que esto es lo que más ha contribuido a que el comic me haya parecido tan bueno. Más que la historia en sí, el propio personaje. Pero también hay que destacar el dibujo del comic. Bastante realista en la mayor parte de la historia pero recurriendo a la exageración en los momentos necesarios. El autor de estos dibujos es el propio Miller y la responsable del color es Linn Varley, quien creo que es la mujer del propio Miller. Como veis, todo queda en casa.

Lo malo de que me haya gustado tanto es que ahora, después de haber leído "El Regreso del Caballero Oscuro" tengo pendientes otras tres series de comics de Batman que me compré en un arrebato de necesidad de gastar (menos mal que estamos en crisis). Y digo que es malo porque cuando ahora lea el resto, seguramente no me acaben llenando tanto como este. Les daré una oportunidad por supuesto (de alguno incluso me han hablado muy bien), pero ya me veo en continua espera por ver aparecer ese lado más siniestro de Batman, a ese vengador de las sombras, a ese verdadero Caballero Oscuro.